Agnes América Winnipeg
Ah… et je me souviens de la mère d’Agnes América Winnipeg… Elle est arrivée sur le quai de Trompeloup sans mari, mais accompagnée de deux enfants en bas âge et enceinte de presque neuf mois… Neruda a refusé de lui accorder un visa… et elle, elle a menacer de se jeter à la mer et a commencé à avancer vers le bord… Ils ont dû la retenir, et le poète… Il lui a donné son visa… Son mari avait quant a lui réussi à monter à bord… La petite est née une semaine plus tard, c’est pourquoi elle porte tous ces noms… Agnes, c’est pour la femme du capitaine… Chacun a sa propre histoire…
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Ester Vila, my father’s family
Ester Vila, my father’s family are originally from Spain, they arrived on the Winnipeg.
Ester Vila, La famille de mon père
La famille de mon père est originaire d’Espagne. Ils sont arrivés sur le Winnipeg
Mi familia paterna – Ester Vila
Mi familia paterna viene de España, llego en el Winnipeg.
El pintor José Balmes
El pintor José Balmes (1927-2016) recuerda: «Toda la bahía estaba iluminada, casi nadie se movió de cubierta hasta el amanecer. Había sol de primavera ese 4 de septiembre. En tierra rostros y manos nos decían su amistad, su bienvenida.
Después de mucho tiempo sabíamos nuevamente el significado de un abrazo (…) El tren nos llevó pronto a Santiago y, al paso lento por las estaciones, gentes que no conocíamos nos entregaban rosas y claveles. Al anochecer miles de hombres y mujeres nos esperaban en la estación Mapocho en medio de una multitud de cantos y banderas. Un tiempo después esta tierra también sería ya la mía para siempre».
José Balmes, painter
José Balmes, painter, remembers : “The whole bay was illuminated; no one moved before dawn. It was the 4th of September, yet the sun gave it an air of spring. On shore, hands and faces were demonstrating their friendship and bidding us welcome.
It took us a while to recall the meaning of a hug. (…) The train swiftly took us to Santiago and, whenever we slowed down to pass through the stations, strangers would give us roses and carnations. In the evening, thousands of men and women were waiting at the Estación Mapocho to welcome us with songs and banners. Later, this land would become mine too, for the rest of my life.”
Le peintre José Balmes
Le peintre José Balmes (1927-2016) se souvient : « Toute la baie était inondée de lumière ; presque personne n’a bougé du pont avant l’aube. En ce 4 septembre, le soleil avait un air de printemps. À terre, les mains et les visages nous témoignaient leur amitié, nous souhaitaient la bienvenue.
Il nous fallut du temps pour nous souvenir de la signification d’une accolade. (…) Le train nous conduisit rapidement à Santiago et, lorsque nous ralentissions pour traverser les gares, des inconnus nous offraient des roses et des œillets. Le soir venu, des milliers d’hommes et de femmes attendaient à la gare Mapocho pour nous accueillir avec une multitude de banderoles et de chansons. Plus tard, cette terre deviendrait mienne pour le restant de mes jours. »
Joan Abril, Le camp de concentration de Saint Cyprien
Joan Abril, Toute l’enceinte qui s’étendait jusqu’à la mer était tapissée d’une foule exorbitante. Il aurait été impossible d’y faire entrer un seul homme de plus. Les femmes et les enfants étaient regroupés dans un autre camp. Les gardes français donnaient à peine à manger aux exilés de la guerre d’Espagne. Les regards affamés et fiévreux de ces pauvres âmes forcées d’endurer les intempéries et de dormir sur le sable humide constituaient un spectacle horrifiant. L’eau salée entraînait des troubles intestinaux. Le camp de concentration de Saint Cyprien a fait couler beaucoup d’encre, et aucun des auteurs n’a exagéré la réalité de cet enfer : tous n’ont dit que la vérité. (Los Españoles de Winnipeg, J. Ferrer Mir, p.50)
Miguel y José Ballester Soriano.Una madre que nunca mas pudo abrazar y besar a sus hijos
Miguel y José Ballester Soriano. Casaron con dos hermanas Juana Hilda Laferte Chávez y Luz Marina Lafertt Chávez (un error tipográfico en el 1º apellido que pasó a los hijos).
Mi tía Marina y su hija mayor vinieron a España a principios de la década de los 60, a conocer a los padres de mis tíos y al resto de la familia.
Ellos eran 5 hermanos, dos se exiliaron, 2 murieron y el que quedaba vivo, cuando murieron sus padres, los hermanos le pagaron el viaje a Chile para verse. En el viaje conoció a Nino Bravo, yo creo que cuando vino habló mas de eso que de sus hermanos y sobrinos.
Hace unos tres años que supe que ellos viajaron en el Winnipeg (me puse en contacto con Jaime Cardona Jasenwirth y me dio muchos datos de mis tíos, hoy se ha puesto en contacto conmigo Ana Calero San Martín, ambos descendiente de pasajeros del Winnipeg), sin embargo si oí el nombre de Pablo Neruda en mi casa. Ellos eran primos hermanos de mi madre, pero la relación con sus padres siempre fue muy cercana. Su madre y mi abuela eran hermanas pero a pesar de que tenían dos hermanos mas, mi tía-abuela siempre se apoyó en mi abuela, subía las cartas que mandaban para que mi hermana se las leyera y las contestara.
Mandaban fotos todos los años, yo no las recuerdo ya que era muy niña, y al parecer mi madre y su hermano también les mandaron fotos de nosotros, ya que cuando mi tío José vino de todos los primos que tenían solo reconoció a mi madre y a su hermano.
Mi tío José y su esposa vivieron dos años aquí, ya que tocó salir de Chile a Alemania del este, con la dictadura de Pinochet, pero sus hijos, hermanos y sobrinos quedaron en Chile, entonces un amigo le consiguió trabajo en Venezuela y marcharon para allá, él dijo: “allí estamos a menos de mitad de camino”.
En 1984 murió mi tío Miguel, el tio José escribió para decirlo, lo que no recuerdo es si él ya había regresado a Chile. En 1997 murió mi tío José. La comunicación con nuestra rama de la familia se cortó, pero se que con sus primos hermanos mantienen el contacto.
Ahora que he podido ver las fotos de mi tío José de cuando hacía todo el papeleo para quedarse en Chile, he comprendido porque el hermano de mi madre lo reconoció cuando lo vio pasar en el coche que lo trajo al pueblo, se parece mucho a su hermano Rafael que es el que murió aquí.
Mi tía-abuela, su madre, siempre le oí decir: de 5 hijos, 4 se me han muerto, a lo que mi abuela le respondía: “Elvira no digas eso, ellos y tú tienen una familia al otro lado del mundo”. SI PERO NUNCA LOS VOLVERÉ A ABRAZAR.
Esto es lo poco que recuerdo o lo que escuché contar a mi madre, no estoy segura, de cuando mi tío vivió en España en los 70, si los recuerdo.
Ovidio Oltra Alonso – Raquel Valero
Ovidio Oltra Alonso – Raquel Valero
My uncle, Ovidio Oltra Alonso, went on the Winnipeg. My grandparents, my other uncle and his family went to Chile in the late 40s. My family and I went in the late 50s — I was still very young at the time. One of my brothers was born there. Although I was born in Spain, I still carry Chile in my heart and it was hard for me to adapt here. Since I grew up in Santiago, I’m not sure exactly where I’m from, but maybe it doesn’t matter. After all this time, I settled in Valencia. This is where I studied, where my children and grandchildren were born; but I know that if Chile could somehow move closer to where I live now, I would be happier for it. Thanks to the Winnipeg and to my uncle’s journey (my mother’s older brother), I went to Chile and was able to enjoy this beautiful country, but dictatorships have left their mark on my life…